viernes, 24 de febrero de 2012

Seremos yo y mi almohada.

Cuando las cosas se salgan de control,
va a llover bajo techado,
y temblará por encima la tierra,
Gritarán mis puños y sudará mi corazón.

Los cristales se harán mas claros
y las puertas se verán cada ves más lejos.
La sal sabrá dulce y el dulce...
dulce que es el consuelo,
no hará más que empalagarme.

Seremos yo mi mi almohada quienes
acudamos a tu rescate.
Entre nosotros idearemos un sueño
lo suficientemente grande para soñar
juntos los 3.

Maquilaremos esperanzas a partir
de nubes azuladas. Resusitaremos
al valiente guerrero que alguna ves
protegió tu corazón. Nos desharemos
de su armadura oxidada, y en su lugar
colocaremos un atrapa sueños. Para
que no entren pesadillas a tu corazón.

Y cuando las cosas se salgan de control,
lloverá bajo techado pero siempre podrás
usar el agua para regar tu propio jardín.